El 6 de febrero, en la pequeña localidad de East Palestine, Ohio, ocurrió un accidente que dejó a los habitantes en estado de pánico. Un tren que transportaba sustancias químicas tóxicas se descarriló, provocando un incendio que cubrió de humo el pueblo. Las autoridades delimitaron una zona de evacuación y llevaron a cabo una emisión controlada de gases tóxicos para neutralizar la carga en llamas dentro de algunos de los vagones del tren.
¿Qué sucedió en Ohio el 6 de febrero?
El accidente ocurrió alrededor de las 9 p. m. del 3 de febrero, cuando un tren se descarriló en East Palestine, Ohio. Unos 50 de los 150 vagones del tren se salieron de las vías en su ruta de Madison, Illinois, a Conway, Pensilvania. La causa del descarrilamiento aún está siendo investigada por la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB, por su sigla en inglés).
El químico que explotó en Ohio
El tren transportaba una variedad de sustancias químicas, entre ellas, cloruro de vinilo. Este es un gas incoloro y peligroso que se utiliza para fabricar plástico PVC y productos de vinilo. El cloruro de vinilo también es un carcinógeno conocido y su contacto puede causar mareos, somnolencia y dolores de cabeza. La exposición prolongada puede provocar daños hepáticos y cáncer de hígado.
Después del accidente, las autoridades realizaron una quema controlada del cloruro de vinilo. Expertos federales, estatales y ferroviarios determinaron que era más seguro realizar esta quema controlada que permitir que el material explotara y causara daños a la ciudad. Aunque la quema generó una gran columna de humo sobre la zona, las autoridades consideraron que había sido un éxito.
El impacto en la salud y el medio ambiente
Los residentes de East Palestine temían por su salud debido a la exposición a los gases tóxicos y al humo proveniente del incendio del tren. Muchos experimentaron dolores de cabeza, ardor en los ojos y dolor de garganta. Además, se reportaron peces muertos en los arroyos cercanos y algunos animales terrestres también sufrieron consecuencias negativas.
La calidad del aire y del agua municipal fue monitoreada por las autoridades estatales y federales. Aunque se realizaron evacuaciones y se tomaron medidas de precaución, hubo cierta desconfianza y escepticismo por parte de los residentes en cuanto a la seguridad de la zona después del accidente. Algunos expertos en medio ambiente cuestionaron la decisión de permitir que las personas regresaran tan pronto a sus hogares.
La situación actual en Palestina Oriental
El gobierno ha asegurado a los residentes que la calidad del aire y del agua es normal y segura. Sin embargo, muchos habitantes de Palestina Oriental siguen preocupados y desconfiados. Han surgido demandas colectivas contra la compañía ferroviaria Norfolk Southern, alegando exposición a sustancias tóxicas y trastornos emocionales debido al accidente.
La situación en Palestina Oriental continúa siendo monitoreada y se están realizando análisis del agua y del aire para garantizar la seguridad de los residentes. Aunque las autoridades han dado su visto bueno para que las personas regresen a sus hogares, la desconfianza persiste y muchos habitantes están considerando abandonar la zona.
El accidente del tren quemado en Ohio dejó a los residentes de East Palestine en estado de pánico y preocupación por su salud y el medio ambiente. Aunque se tomaron medidas de precaución y se llevó a cabo una quema controlada de sustancias tóxicas, persiste la desconfianza y el escepticismo en cuanto a la seguridad de la zona. Las autoridades continúan monitoreando la calidad del aire y del agua, y se espera que se realicen más investigaciones para determinar las causas exactas del accidente.
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